EE. UU. impone restricciones de visado a funcionario haitiano acusado de apoyar a bandas criminales
La medida busca apoyar la contención de bandas que EE. UU. clasifica como grupos terroristas por su dominio territorial y violencia extrema

El Departamento de Estado de Estados Unidos anunció este lunes la imposición de restricciones de visado contra un funcionario del gobierno haitiano, al que acusa de apoyar a pandillas y otras organizaciones criminales que operan en el país vecino.
La medida, confirmada a través de una declaración oficial firmada por Tommy Pigott, principal portavoz adjunto, se ejecuta bajo la sección INA 212(a)(3)(C), que prohíbe la entrada a personas cuya presencia se considere capaz de generar consecuencias diplomáticas particularmente graves para Estados Unidos.
Además de prohibir su ingreso al territorio estadounidense, el Departamento de Estado informó que revocará todos los visados vigentes que la persona sancionada posea.
- Se trata de la primera acción de este tipo anunciada públicamente desde octubre de 2022, cuando Washington estableció una política específica para castigar a quienes financian o brindan apoyo logístico a las pandillas haitianas. Esa misma directriz también contempla sanciones contra familiares directos de los señalados.
Violencia haitiana
Según el comunicado, la decisión busca respaldar los esfuerzos por contener a los grupos armados, catalogados por la administración estadounidense como "organizaciones terroristas extranjeras" debido a su control territorial, sus secuestros masivos y los ataques recurrentes contra civiles y autoridades.
"El pueblo haitiano está cansado de la violencia de las pandillas, la destrucción y las disputas políticas internas", señaló el Departamento de Estado, subrayando que la medida procura favorecer avances concretos hacia la estabilidad y la celebración de elecciones libres y justas.
La declaración concluye asegurando que la administración Trump seguirá promoviendo la rendición de cuentas para quienes continúan desestabilizando a Haití y a la región, en un momento en que la crisis institucional y la inseguridad se mantienen como los principales obstáculos para el restablecimiento del orden en el país caribeño.


