Lenguaje claro y accesible
Un lenguaje correcto, más claro y más accesible, nos acerca a una sociedad más justa

En diciembre de 1875 el dominicano Manuel de Jesús de Peña pronunció un discurso en la Sociedad Amantes de la Luz de Santiago en el que defendió el conocimiento y el buen uso de la lengua española como garantía de la libertad de los dominicanos:
«El estudio de nuestro rico idioma es una garantía de independencia y libertad... ¿Cómo no sublevarnos al escuchar en una lengua extraña todos los nombres de los objetos que nos son más caros en la patria?... Y las ideas liberales, tan hermosas en sí mismas, son muchos más hermosas cuando se expresan en un hermoso idioma; y solo las ideas liberales pueden extirpar las prácticas absolutistas».
No dejarse arrastrar
Acaba de celebrarse en Lima (Perú) la II Convención de la Red Panhispánica de Lenguaje Claro y Accesible, en la que he tenido el honor de participar como directora del Instituto Guzmán Ariza de Lexicografía y miembro de la Academia Dominicana de la Lengua.
La Red trabaja para lograr que las administraciones públicas y las instituciones públicas y privadas se comprometan a usar un español claro y accesible en su comunicación con los ciudadanos.
Estamos convencidos de que es una tarea trascendente de responsabilidad social: el lenguaje claro y accesible en la relación entre el poder, de cualquier tipo que este sea, y el individuo es fundamento de los valores democráticos y garantía de respeto a los derechos de la ciudadanía.
Mientras trabajábamos en Lima para diseñar iniciativas que fortalezcan este derecho de todos los ciudadanos a comprender el lenguaje de las leyes que nos gobiernan, y que estamos obligados a respetar, me acordé de Manuel de Jesús de Peña, ese dominicano que comprendió que en el buen uso de la lengua española había una «garantía de independencia y libertad».
Un lenguaje correcto, más claro y más accesible, nos facilita el acceso a la información pública y favorece la transparencia del ejercicio del gobierno.
Hoy, en este pedacito de historia que nos ha tocado vivir, es más importante que nunca que los ciudadanos hablemos, es más importante que nunca la participación ciudadana en la vida pública.
Cuando los ciudadanos callan, porque no entienden o porque tienen miedo a expresarse, siempre aparece quien hable por ellos, con o sin su consentimiento.
El objetivo principal de esta Red Panhispánica de Lenguaje Claro y Accesible consiste en exigir alto y claro el derecho fundamental de todas las personas a comprender.
Nos comprometemos a trabajar desde nuestras instituciones en proyectos concretos que promuevan el uso de un español correcto, adecuado, comprensible, empático con la persona a la que nos dirigimos.
¿Cuántas veces han tenido en sus manos una lista de requisitos, un certificado o un contrato que resulta absolutamente ininteligible? Hay muchas razones detrás de la oscuridad de este lenguaje incomprensible.
Partimos generalmente de un uso incorrecto de la lengua española; si a esto le añadimos dejadez institucional a la hora de comunicarse con el ciudadano y esa idea descabellada de que escribir enredado nos hace parecer más cultos, tenemos la tormenta perfecta: textos administrativos que parecen escritos para que no los entendamos.
Entre todos en la Red sumamos esfuerzos para acercarnos a una sociedad en la que los ciudadanos comprendan a quienes han elegido para que los gobiernen y administren; solo así nos acercaremos también a la igualdad, la inclusión y la justicia social.