×
Compartir
Versión Impresa
versión impresa
Secciones
Última Hora
Podcasts
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Juegos
Herramientas
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Redes Sociales

Una panorámica sobre la obra social y cultural de la Iglesia Católica en la República Dominicana

La Iglesia Católica como columna vertebral de República Dominicana

Expandir imagen
Una panorámica sobre la obra social y cultural de la Iglesia Católica en la República Dominicana
La Iglesia Católica en República Dominicana tiene una presencia histórica y multifacética que trasciende lo religioso. (FUENTE EXTERNA)

La Iglesia Católica en la República Dominicana lleva adelante su misión pastoral a través de 11 diócesis (integradas en dos arquidiócesis) y un ordinariato militar, con 675 parroquias, y 75 capellanías en regimientos militares y policiales, hospitales y unidades penitenciarias, que alcanzan a cubrir todo el territorio nacional, desde la locación urbana más antigua hasta el más recóndito paraje de los ambientes rurales del país.

Desde más de 300 años antes de la proclamación republicana del naciente Estado Dominicano, ya estaba en este territorio el accionar de la Iglesia Católica, marcando con sabor y mística cristiana las más relevantes iniciativas de progreso, desarrollo y bienestar del llamado Nuevo Mundo.  La Iglesia lideró la conformación de las primeras instancias de educación y enseñanza, las primeras escuelas, la primera universidad; así también el primer hospital, el leprocomio o lazareto.  Y no digamos lo que significó, y sigue significando hasta el día de hoy, el establecimiento de órdenes religiosas y el foco cultural de las casas conventuales.

Un juicio histórico sobre la Iglesia Católica en República Dominicana la sitúa muchísimo más allá de su trabajo más fundamental y propio, porque la Iglesia es algo más que una institución de carácter espiritual o religioso.  Se ha encarnado en la vida nacional con una presencia pentacentenaria que habla de una cosmovisión cristiana que se ha insertado en la vida de nuestro pueblo, buscando su trascendencia y dignidad.

El grito de Montesinos motorizó el compromiso indiscutible de la Iglesia con las causas sociales, especialmente la defensa de la dignidad humana y la vocación de todo hombre a autodeterminarse en función de su conciencia y libre albedrío.

 

La causa educativa

La enseñanza escolástica deudora de un pasado colonial centenario pronto hizo el transfer en los albores de la incipiente República Dominicana, aún a regañadientes bajo el liderazgo de Monseñor Meriño se dio paso a un sistema escolar más cercano a las propuestas normalistas de Hostos, cosa que no se trató de temas ideológicos sin más, sino como la definición que fungiera como brújula del nuevo estado dominicano.

Actualmente, casi mil instituciones educativas están bajo la sombrilla de la mística de la educación católica.  Desde instituciones propiamente católicas en función de su fundación y propiedad, pasando por una inmensa mayoría de escuelas públicas, hasta otros centros ligados a fundaciones e instituciones no gubernamentales.  Así como otros tipos de centros de enseñanza no formal, salas de tarea, centros de alfabetización, escuelas agrarias, escuelas de formación popular, cultural y comunitaria; escuelas agrícolas y agroforestales; institutos de formación técnica, clubes de madres, etc.

El compromiso con la educación llega hasta los niveles de formación superior, con una treintena de centros, que van desde universidades, centros especializados, facultades eclesiásticas, centros técnico-profesionales.  Junto a ello el compromiso de los liderazgos eclesiales con la causa educativa en distintas instancias públicas y de la sociedad civil.

Salud física, salud espiritual

En los evangelio es impensable la predicación de Jesús sin su compromiso de hacer corresponder la salud del alma con la salud del cuerpo.  La Iglesia está muy unida en su misión a la suerte de los enfermos.  En República Dominicana la Iglesia Católica lleva adelante atenciones de salud a través de una red, cuasi nacional en su organización, de más de 200 centros asistenciales de primer; dispensarios, policlínicas, consultorios, laboratorios, consultorios dentales, servicio social y voluntariado de los hospitales, consejos de dirección y patronatos de hospitales y centros especializados, tienen la impronta de una vocación de servicio orientada a ser un alivio y parte de la solución del tema salud.

Junto a ello existe en cada parroquia un grupo de hombres y mujeres consagrados para asistir desde la caridad cristiana y la amistad con todos, a todos los enfermos que en su domicilio necesitan un apoyo, presencia o ayuda espiritual y material para sobrellevar la enfermedad.  Pastoral de los enfermos y pastoral de la salud se unen para ser la suave y milagrosa mano del Señor Jesús que con su amor se vuelve bálsamo que sana y consuela.

Promoción humana

La Pastoral Social en todo el país aterriza en acciones concretas las enseñanzas de la Doctrina Social de la Iglesia, haciéndose parte del cambio y del progreso que demandas las comunidades y sectores más vulnerables y olvidados.  Impactando miles de familias en distintos temas sensibles a la dignidad de las personas: promoción de la mujer, medio ambiente y ecología, escuelas de padres, asistencia técnica para el campo y labores diversas, clubes culturales, formación artística, deportes, la cuestión obrera y campesina, vivienda, acueductos, maternidad, atención a la infancia, juventud, cárceles, financiamiento y asesorías para emprendimientos, cooperativismo, sindicatos, participación ciudadana, migración y cultura.

La vocación profética de la Iglesia mantiene a la expectativa a la población; el sentido crítico se vuelve una orientación importante sobre grandes temas de la agenda nacional que hacen parte del trabajo social de la Iglesia.

Justamente ese espíritu orientador y "mentalizador" ha consolidado los medios de comunicación católicos, con varios canales de televisión, abierta y por cable, más 15 emisoras católicas de gran solidez y relevancia en sus regiones de transmisión, un semanario, diversas revistas de divulgación impresas y digitales.  El vínculo deontológico con la verdad es una misión de comunicación valiente, comprometida y liberadora.

Iglesia aterrizada en el mundo

La Iglesia fiel a su vocación está imperiosamente urgida a seguir siendo un ente que favorezca el desarrollo de los pueblos, a través de la promoción y el empuje de los mejores valores que adornan el alma humana.  Con fervoroso apego al espíritu del Concilio Vaticano II sigue impulsando un relación provechosa y constructiva con el mundo y su propia autonomía, lo mismo vale para su relación con la ciencia y otros saberes diversos.

En República Dominicana la Iglesia Católica cónsona con su inspiración original está abierta al diálogo con otras creencias, se sabe unida a otras comunidades de fe cristiana con las que comparte su adhesión a Jesucristo, al tiempo que entiende que la unidad compacta en torno a los valores de la familia, la vida y la dignidad humana es una definición de la enseñanza apostólica en torno a una sola fe y a un solo Señor. 

Esta panorámica de la Iglesia Dominicana nos acerca a una visión cultural de la Iglesia y una comprensión radicalmente religiosa de la nación dominicana.  Creo que en honor a la verdad la Iglesia es la principal institución de la República Dominicana, porque no hay punto de la vida nacional que la Iglesia no alcance a iluminar o tocar con su misión.

TEMAS -

Obispo de La Altagracia.