El Defensor del Pueblo y la construcción de ciudadanía
La entidad, además de garantizar los derechos y la buena administración, tiene como encomienda promocionar y educar a la población para que conozca sus derechos

El Defensor del Pueblo de la República Dominicana es una institución creada mediante la Ley 19-01 con autoridad independiente, autonomía funcional, administrativa y presupuestaria, para salvaguardar prerrogativas personales y colectivas de los ciudadanos frente a la Administración pública.
Aunque la organización de servicios fue creada en el año 2001, no fue hasta el 2013 que se escogió la primera incumbente, siendo seleccionada la exfiscal del Distrito Nacional, Zoila Martínez Guante, quien estuvo en la posición hasta el 2021.
Tras ocho años al frente del Defensor del Pueblo, Martínez Guante fue sustituida y en su lugar fue elegido Pablo Ulloa, actual titular, con una propuesta de independencia y un plan basado en la promoción y difusión de los derechos humanos.
Para implementar dichas acciones, el Defensor del Pueblo no solamente implementó cambios en su estructura, sino que creó la Oficina de Oportunidades de la entidad. Esta busca promover, educar y dar a conocer los derechos ciudadanos, establecidos en nuestra Constitución.
Es a través de esta oficina que se inicia con la transformación del trabajo del Defensor que, además de defender, tiene el deber de educar, debido a que no se puede defender lo que no se conoce. Una muestra de esto último fueron los resultados de la primera encuesta hecha por la actual gestión, que establecía que un 54 % de la población no conocía sus derechos y un 60 % de los más jóvenes y pobres sólo conocía el derecho a la vida entre la cantera de los derechos fundamentales.
Es en virtud de estos datos que la gestión de Pablo Ulloa se vio obligada a llevar acciones para que los dominicanos conozcan cuáles son sus derechos. Entonces, se implementó como un primer trabajo la Constitución Animada para Niñas y Niños, un compendio de varios capítulos a través de YouTube, donde se muestran los derechos fundamentales establecidos en nuestra carta magna.
A estas iniciativas se unieron El Defensor Escolar, Defensor TEC, el Voluntariado de los Derechos, La Ruta de los Derechos (una acción que, en su primera etapa, visitó 28 provincias) y Los Diálogos en tu Comunidad, acciones todas para promover los derechos de las personas.
La Ruta de los Derechos abarcó un total de nueve actividades en cada provincia. Incluyó encuentros en escuelas y con mujeres, visitas a las cárceles y la Feria de los Derechos. Estas últimas actividades involucraron a los privados de libertad que ya se encontraban en el denominado Medio Libre.
Otra de las tareas del Defensor del Pueblo ha sido la Constitución Viva para Todos y Todas, que es ir todos los lunes a un centro educativo del país a promover el conocimiento de los derechos, pero, sobre todo, a que cada estudiante, no importa su estrato social, pueda saber cuáles son sus deberes y derechos constitucionales.
Cómo testigo de excepción, puedo dar fe y testimonio de que la promoción de los derechos es una tarea que debemos promover en lo público y privado, porque una población sin derechos es como una ciudadanía sin razón.
Apoyemos toda acción que abone a conocer los derechos y deberes, ya que con eso rompemos el ostracismo, la oscuridad en la que vive gran parte de nuestra población que no solo necesita saber sus derechos, sino entender cómo reclamar o a quién acudir para hacer valer sus derechos.

Juan Reyes