Las brechas en financiamiento reducen el promedio de vida de mipymes lideradas por mujeres
Las mipymes lideradas por mujeres tienen características que las hace ver "más riesgosas" para la banca, afirma Promipyme

Los primeros años de una micro, pequeña o mediana empresa (mipyme) son decisivos para definir su estabilidad a lo largo del tiempo. A pesar de que cada vez hay más emprendimientos liderados por mujeres, estas siguen enfrentando barreras operativas y financieras que reducen sus probabilidades de éxito.
Si una mujer emprende un negocio, este pudiera tener un promedio de vida de 6.92 años, muy inferior a los 13.31 años que podría mantenerse si este estuviera liderado por un hombre, según un estudio del Consejo Nacional de Promoción y Apoyo a las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Promipyme).
Esto significa que los primeros años de vida de una mipyme se reducen hasta 6.39 años si son lideradas por una mujer. Su director, Fabricio Gómez, explicó que existe una compleja interacción de factores que impactan la bancarización y el acceso al crédito para las mipymes lideradas por mujeres, debido a brechas atribuibles a la discriminación de género.
Señaló que las mipymes lideradas por mujeres presentan varias características que las hace ser percibidas como "de mayor riesgo" para los proveedores de financiamiento, entre ellas:
- Son proyectos más jóvenes
- Se dedican al sector servicios –como alojamiento o salones de belleza–
- Tienen menos trabajadores que las de los hombres
- Suelen ser registrados como cuentapropistas (empresas de un solo dueño).
Al ser tachadas con perfiles de riesgo más elevados, los proveedores "restringen el acceso al crédito" aseguró el funcionario tras presentar el estudio "Bancarización y acceso al crédito para las mipymes en la República Dominicana: una perspectiva de género en base a la Enhogar-2022".
Más cuentas de ahorro que corrientes
En la presentación del análisis, Gómez explicó que existen diferencias significativas "en todos los productos financieros para las mipymes" lideradas por hombres, versus aquellas en las que las mujeres lo encabezan.
"La brecha se mantiene en dos elementos esenciales para cualquier empresa: en la cuenta corriente y en la línea de crédito", señaló.
De hecho, de acuerdo al estudio, solo el 45.38 % de las empresarias tienen una cuenta de ahorros, mientras que en productos como las cuentas corrientes o las líneas de crédito "la participación es muy limitada".
También se evidencian brechas en préstamos personales y comerciales en la banca informal si se le compara con las mipymes encabezadas por un hombre, a menos que el préstamo sea informal, donde los márgenes "son mucho más reducidos".
"Es decir: las mujeres van (hacia) los préstamos informales en mayor proporción con la que van a los préstamos comerciales y personales (formales)", indicó Gómez.
Menos empleados
De igual manera, los pequeños negocios liderados por mujeres tienden a emplear a menos personal que sus pares masculinos.
"Los datos sugieren que las empresas lideradas por mujeres no solo enfrentan desafíos para escalar o crecer, sino también para mantener su operatividad en el largo plazo. Esta diferencia constituye un factor crucial que influye en el acceso al recurso financiero, su capacidad para tener historial crediticio y su resiliencia frente a cambios en el mercado", enfatizó.