Los dominicanos aprobaron con A las pruebas de dopaje en la MLB
Por primera vez desde 2008 no hubo suspensión a duartiano, apenas la segunda ocasión en 21 años

La delegación de 155 peloteros dominicanos que pasó por las Grandes Ligas en 2025 disparó casi 800 jonrones, los lanzadores superaron los 4.000 ponches y en conjunto devengaron poco más de 620 millones de dólares en salarios.
Otra gran conquista del grupo fue sacar 100 en una asignatura que suele embarrar la imagen de la Marca País. Por primera vez desde 2008 no hubo pelotero quisqueyano en roster de 40 que fallara a prueba de dopaje. Y es apenas la segunda vez en los 21 años que la liga lleva publicando los resultados que no ocurre.
El dato es más resaltante si se toma en cuenta que en el año/calendario que acaba de concluir se alcanzó el récord de pruebas con 11.700 repartidas en 9.400 de orinas y 2.300 de sangre procesadas en el laboratorio de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA).
En promedio, cada jugador en nómina activa de la Major League Baseball fue examinado 9.7 veces entre diciembre de 2024 y el final de la Serie Mundial el primero de noviembre último.
- Solo el jardinero curazoleño Jurickson Profar (Bravos) y el relevista venezolano José Alvarado (Filis) fallaron a pruebas y cumplieron sanción de 80 partidos.
Dominio abrumador
La MLB comenzó su programa de dopaje en 2004, bajo presión del Congreso estadounidenses, y al año siguiente arrancó con las suspensiones. Solo en 2008 no hubo al menos un caso de dominicano.
En el trayecto, van 48 duartianos sancionados por fallar en los controles o por su vínculo al programa de la clínica Biogenesis. Fueron el 51 % de los 94 castigados.
En cambio, solo van sancionados 29 estadounidenses, ocho venezolanos, tres cubanos y dos puertorriqueños. Panamá, Japón, Nicaragua y Curazao tienen uno.
Sin embargo, cuando se totalizan las suspensiones las aplicadas a dominicanos se estiran a 55 con las tres a Jenrry Mejía y dos para Manny Ramírez, Neifi Pérez, Guillermo Mota, Robinson Canó y J.C. Mejía.




Nathanael Pérez Neró