Brugal ofrece degustación de sus envejecidos a las cronistas sociales
El restaurante Okra sirvió de escenario al evento en el que, la embajadora Brugal, Susana Ortega, explicó la historia, proceso de elaboración y envejecimiento de Brugal Leyenda, Leyenda quinto aniversario y Brugal 1888

La fortaleza del sabor y el exquisito aroma de Brugal Leyenda, creado en homenaje al legado del fundador de Brugal 1888, don Andrés Brugal Montaner, matizaron el cálido y festivo ambiente en la cena-degustación del producto ofrecida por los ejecutivos de la empresa a la Asociación Dominicana de Cronistas Sociales (ADCS), en el restaurante Okra, ubicado en Acrópolis Center.
La exquisita velada fue presidida por la embajadora de Brugal, Susana Ortega, perteneciente a la quinta generación familiar, y Mirna Pimentel, presidenta de la ADCS. Susana explicó la historia y legado de don Andrés Brugal Montaner, hombre tenaz y trabajador incansable, quien a finales del siglo XVIII cruzó el Pacífico hasta llegar a la República Dominicana, donde sembró la semilla de la excelencia del ron dominicano hasta convertirlo en la cosecha del mejor ron nacional e internacional.

Habló también de cómo Brugal Leyenda, cuya esencia se mantiene intacta desde 1888, lleva impregnada en su fina etiqueta la firma de su creador, quien emigró desde España hasta Cuba y luego a la República Dominicana.

Brugal Leyenda es un ron super premium que fue lanzado en el 2015, con una graduación alcohólica del 38 %, y creado en homenaje al fundador de Brugal, don Andrés Brugal Montaner. Además del destilado, la compañía puso especial cuidado en la elección de la botella y envoltura. Su destilador primero selecciona rones madurados durante ocho años en barricas de roble que contuvieron jerez, lo que les proporciona un exquisito sabor meloso, luego completa cada lote con la cantidad justa de ron añejado en barricas de roble que albergaron bourbon para lograr la suavidad y el equilibrio perfectos. El período de vida de las barricas es de 20 años.
Su maduración en barricas de roble produce notas de chocolate y roble, entremezcladas con una suavidad que nos recuerda el caramelo. Su apariencia es limpia y pura con un matiz de caoba cristalina. Su suave aroma, con notas leñosas leves, rastros de caramelo, miel y frutos secos agradan subliminalmente al paladar y al olfato.