Cuando el cansancio apaga el deseo
Es bastante lógico sentirse agotada si una pasas la mayor parte del tiempo ocupada entre los hijos y lo laboral, y es que el agotamiento no quiere nada con el sexo

Pregunta: Saludos, Dra. Ana. Tengo un buen esposo; me complace en todo lo que está a su alcance. No porque me complazca digo que es bueno, sino porque a diario me lo demuestra.
Llevamos 9 años juntos. Yo tengo 27 años y él tiene 38. El problema es que todo el tiempo quiere intimar conmigo, pero yo siempre vivo cansada. Aunque no quiera, soy el cansancio hecho persona. Nuestros hijos tienen 5 años y 3 años.
Soy ama de casa, trabajo 4 horas y, cuando llego del trabajo, atiendo un negocio de comida rápida en nuestra casa. Él viene cada 8 y 15 días. Siempre me cuestiona porque, aunque quiero intimar con él, no puedo.
Me vivo durmiendo, pero es que tantas cosas me tienen que ni apetito sexual me da, y no es porque no lo ame.
Es que, desde que me levanto hasta que me acuesto, es haciendo quehaceres en el hogar, atendiendo a nuestros hijos, preparando las cosas para vender en la noche, alistarlos a los tres antes de salir a trabajar y alistarme yo también.
Hasta la universidad tuve que parar porque no tenía tiempo y no podía concentrarme. No tengo ayuda y eso no lo entiende; solo dice que no lo quiero, pero es ciego ante todo lo que vivo a diario.
Presión desde dos mundos, la carga invisible de vivir lejos
Respuesta
Es bastante lógico sentirte agotada si te pasas la mayor parte del tiempo ocupada entre tus hijos y lo laboral, y es que el agotamiento no quiere nada con el sexo.
A esto se le sumaría la presión de tu esposo, que te dice "que no lo quieres", y eso es el antiafrodisíaco más letal a la hora de tener una buena respuesta sexual.
Me expresas que no tienes ayuda, pues entonces eso debes sopesarlo, pues si no bajas el ritmo para lograr un buen descanso, no lograrás de nuevo conectar sexualmente con tu esposo.
Siéntate a conversar con él, háblale de ti, de tu sentir, tu malestar y la necesidad que tienes de arreglar la intimidad con él. Pero también le dirás que su presión no ayuda, que también necesitas otro tipo de cariño donde no necesariamente se termine en sexo.
Reafirma lo mucho que lo amas y que lo único que quieres es sentirte entendida por él. Luego le hablas sobre la ayuda que requieres y busquen opciones.