Una gran división entre el jurado tensa deliberaciones del 'caso Weinstein' en Nueva York
El jurado del nuevo caso contra Harvey Weinstein en Nueva York mostró divisiones durante su tercera jornada de deliberaciones, solicitando al juez aclaraciones sobre las normas y cómo manejar el desacuerdo

El jurado encargado de deliberar sobre el nuevo 'caso Harvey Weinstein' en Nueva York se mostró muy dividido este lunes, durante su tercera jornada de reflexión, y solicitó al juez encargado, Curtis Farber, que les aclarara las normas de la deliberación y qué hacer ante una situación de desacuerdo.
Weinstein está acusado por tres mujeres de dos agresiones sexuales en primer grado y de una violación en tercer grado, que podrían acarrearle hasta 25 años por los dos primeros delitos y un máximo de cuatro por el tercero.
El jurado comienza a deliberar en el 'caso Weinstein' por delitos sexuales en Nueva York
Deliberaciones del jurado
El lunes por la mañana, los miembros del jurado enviaron dos notas al magistrado: en la primera, solicitaban información acerca de las reglas de la deliberación y del concepto de duda razonable; y en la segunda, pedían conocer mejor cómo resolver un escenario de profundo desacuerdo, en el que aparentemente se encuentran.
Las deliberaciones de un jurado deben terminar con un veredicto consensuado de culpabilidad o no culpabilidad, y, por ello, en los casos más delicados, las discusiones se prolongan durante varios días, hasta que una mayoría convence a los más reticentes.
Además, la persona encargada de asumir la presidencia del jurado comunicó al juez que quería hablar con él "sobre una situación que no es muy buena".
Weinsteinrenunció a su derecho a estar presente en esa conversación, que se celebró en privado y fuera del alcance de la prensa.
Durante las deliberaciones, el jurado ha solicitado antes, en diversas ocasiones, a las partes revisar el historial médico de la denunciante Jessica Mann, así como algunos de sus intercambios de correos electrónicos y una transcripción del testimonio de Kaja Sokola y Miriam Haley, que fueron presentados como pruebas por la Fiscalía.
Además, el viernes, uno de los jurados alertó al juez Curtis Farber de que algunos de sus compañeros habían discutido sobre el caso en ausencia del resto y fuera de la sala habilitada para ello. La defensa solicitó, sin éxito, la anulación del juicio, y Farber se limitó a enviar una advertencia a los jurados.
Ese mismo miembro pidió más tarde, sin éxito, ser descartado del proceso de deliberaciones tras supuestamente haber presenciado alguna conducta intimidatoria por parte de algún integrante del panel hacia otros compañeros, lo que calificó de "injusticia".
En la primera sesión, el jueves pasado, cuando ya se preveía que el jurado fuera enviado a deliberar, una de los miembros del panel se ausentó, aduciendo que estaba sufriendo ansiedad e incluso vomitando, por lo que, a pesar de que la defensa requirió infructuosamente que se esperara a su reincorporación, fue sustituida por una suplente.