Perfil de un buen padre: 10 cualidades que te convierten en un gran papá
Están comprometidos con suplir las necesidades económicas, sociales, físicas y emocionales de sus hijos

Este domingo 27 de julio se celebra el Día de los Padres, en República Dominica. Una ocasión perfecta para destacar a esa tan importante figura en la vida de todas las personas para lograr construir emociones equilibradas y el bienestar integral.
Los varones de generaciones como los Millenials y los Z se muestran cada vez más interesados en ser padres afectivos y muy comprometidos con la crianza emocional.
Para especialistas en Psicología, Josly Willmore, Laura Pichardo y Nancy Patricia Canó, esta evolución no solo mejora el bienestar de los hijos, sino también el de la familia y la sociedad.
¿Cuáles son?

Los expertos destacan cuáles son las principales características que caracterizan a un buen padre:
- Cariñoso y afectivo. Un buen padre expresa amor de forma abierta, da abrazos, besos y palabras de afecto. Su presencia es emocional, no solo física.
- Responsable (económica y emocionalmente). No solo cumple con lo material, sino que se hace cargo de las necesidades emocionales de sus hijos: seguridad, apoyo y estabilidad.
- Involucrado activamente en la crianza.Participa en tareas cotidianas como llevar al niño al médico, asistir a la escuela, involucrarse en actividades deportivas y artísticas.
- Escucha activa y comprensión.Un gran papá sabe escuchar a sus hijos con atención, sin juzgar. Comprende sus emociones y pensamientos, validando lo que sienten.
- Tiempo de calidad. Dedica tiempo real, sin distracciones, para jugar, conversar, acompañar o simplemente estar con sus hijos. Presente, no ausente.
- Modelo emocional sano. Regula sus propias emociones, expresa lo que siente de forma adecuada y enseña con el ejemplo cómo manejar la frustración y el enojo.
- Acepta y respeta a sus hijos como son. No impone una versión idealizada, sino que acoge a sus hijos con sus fortalezas y debilidades, fomentando su autoestima y autenticidad.
- Fomenta la inteligencia emocional. Ayuda a sus hijos a reconocer y gestionar sus emociones, desarrollar empatía, negociar y resolver conflictos sanamente.
- Colaborativo y solidario. Comparte las responsabilidades del hogar, apoya a la madre (si está presente) y demuestra que la crianza es un trabajo en equipo.
- Intencional y comprometido. No deja la paternidad al azar. Se compromete genuinamente a estar presente y formar parte activa del desarrollo de sus hijos, construyendo vínculos fuertes y duraderos.