El océano costero, un poderoso sumidero de CO2
Investigación revela su papel crucial en la regulación del clima global
El océano costero, que cubre solo alrededor del 7 % de la superficie oceánica mundial, se ha revelado como un sumidero desproporcionadamente efectivo para el dióxido de carbono atmosférico (CO2).
A pesar de su extensión limitada, los mares continentales y marginales absorben más dióxido de carbono por área que el océano abierto. Datos observacionales indican que el océano costero está absorbiendo actualmente entre 0.19 y 0.30 giga toneladas de carbono por año del dióxido de carbono atmosférico. Esta rápida absorción plantea interrogantes sobre los impulsores detrás de este fenómeno y su contribución al ciclo global del carbono.
El comportamiento del carbono en el océano costero está influenciado por una serie de factores que afectan la magnitud del sumidero de CO2 costero. Cambios climáticos, como la acidificación oceánica y el calentamiento atmosférico, impactan la capacidad del océano para absorber dióxido de carbono. Además, la actividad humana, incluida la agricultura y el tratamiento de aguas residuales, afecta los nutrientes que llegan al océano, lo que a su vez influye en la fijación biológica de carbono.
Investigación
Un estudio publicado el pasado 22 de marzo en la revista Nature Climate Change titulado "La captación mejorada de CO2 en el océano costero está dominada por la fijación biológica del carbono", explica que las observaciones indican un aumento en la absorción de CO2 por parte del océano costero, impulsado principalmente por respuestas biológicas al cambio climático y al aumento de los nutrientes fluviales.
Desafíos ante el carbono costero
Estudios basados en observaciones sobre los flujos de carbono en el océano costero enfrentan desafíos debido a la escasez de datos y la alta variabilidad natural de los procesos biogeoquímicos. Por otro lado, los modelos dinámicos globales proporcionan campos variables espacial y temporalmente completos, pero luchan por representar procesos físicos y biogeoquímicos relevantes para el ciclo del carbono costero.
Se ha aplicado el modelo global de biogeoquímica oceánica ICON-Coast para comprender cuantitativamente las alteraciones antropogénicas en la eficiencia de absorción de dióxido de carbono del océano costero. Este modelo, que emplea una configuración de rejilla no estructurada con una resolución horizontal aumentada en áreas costeras, ha demostrado ser efectivo para representar la transformación, transporte y almacenamiento de carbono en las plataformas continentales.
Controladores del sumidero de CO2
El sumidero de CO2 costero se ve influenciado por diversos factores, como el aumento del afloramiento en sistemas de las fronteras orientales y el retroceso del hielo marino en latitudes altas. Estos cambios climáticos impulsados por humanos están fortaleciendo la capacidad del océano costero para absorber CO2.
Las simulaciones muestran que el océano costero es un sumidero de CO2 más eficiente que el océano abierto, especialmente en latitudes bajas. Este fenómeno se atribuye en gran medida a la alta fijación de carbono biológico en estas áreas. Aunque el océano abierto también actúa como sumidero de CO2, el océano costero desempeña un papel crucial en el ciclo global del carbono debido a su capacidad para transformar y almacenar carbono de manera más eficiente.
El estudio sugiere que el océano costero enfrentará tasas de absorción de CO2 cada vez más aceleradas debido a las emisiones de combustibles fósiles, el cambio climático y las perturbaciones humanas en los sistemas de agua dulce. Comprender la dinámica del carbono en el océano costero es crucial para evaluar la evolución histórica y prospectivas del ciclo del carbono y sus impactos en el clima global. Aldo Croquer, gerente del Programa de Conservación Marina del Caribe Central para The Nature Conservancy, dijo a Diario Libre que la República Dominicana cuenta con grandes extensiones donde los manglares, los pastos y los arrecifes colindan para formar una intrincada red de interacciones biológicas, ecológicas y bioquímicas que determinan el bienestar económico de miles de personas.