La FAO propone prohibir la pesca recreativa de la anguila europea para salvarla
La FAO determinó que "está en peligro crítico de extinción"
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) ha propuesto un plan para proteger la anguila europea que pasa, entre otras medidas, por prohibir "completamente" la pesca recreativa de este pez en riesgo.
La FAO investigó el estado de esta especie tan apreciada en la cocina europea en nueve países mediterráneos -España, Albania, Argelia, Egipto, Francia, Grecia, Italia, Túnez y Turquía- entre los años 2020 y 2022, y determinó que "está en peligro crítico de extinción".
El organismo especializado de Naciones Unidas hizo hoy público su informe y propuso prohibir totalmente la pesca recreativa, un cierre temporal de las pesquerías e impulsar "una red de seguimiento" que identifique las medidas eficaces para cambiar su situación.
Entre otras cosas, se plantea un cierre "parcial" de las zonas de pesca de la anguila durante seis meses al año y la prohibición "permanente" de su pesca recreativa, la que se realiza con finalidades deportivas, pasatiempo o competencia sin fines de lucro.
"La anguila europea y los hábitats que albergan sus diferentes etapas de vida requieren acción y protección en todos los frentes: biológico, ambiental, socioeconómico", sostuvo en un comunicado la responsable de Recursos Pesqueros de la Comisión General de Pesca (CGPM) del Mediterráneo de la FAO, Elisabetta Betulla Morello.
En su opinión, "la cooperación es esencial para identificar e implementar medidas adecuadas, no solo para gestionar las zonas de pesca, sino también para proteger el medio ambiente".
El documento señala también otros factores que ponen en riesgo la supervivencia de la anguila, como el cambio climático, la presión pesquera o la contaminación.
La disminución de la población de la anguila europea ya afecta, sostiene la organización, a pescadores que han sufrido una reducción de sus capturas.
"Antes de mí, mi padre y mi abuelo solían pescar aquí. Todos pescamos para ganarnos la vida. Desafortunadamente, ahora pescamos muy poco", alegó en el mismo comunicado Adriano Deiana, pescador de la isla italiana de Cerdeña.