Hombres armados matan a dos guardabosques en parque de la República Democrática del Congo
Cerca de 200 guardabosques han perdido sus vidas en poco más de una década

Hombres armados atacaron este viernes a una patrulla de guardabosques del parque nacional de Virunga, en el este de la República Democrática del Congo (RDC), y mataron a dos de ellos, mientras un tercero resultó herido, confirmaron este sábado las autoridades medioambientales congoleñas.
"Este viernes 23 de diciembre de 2022 por la tarde, un grupo de hombres armados que se parecían a los Mai Mai atacó a unos guardabosques cuando estos llevaban a cabo una patrulla de rutina en (...) el sector del centro del parque", dijo este sábado a través de un comunicado el Instituto Congoleño para la Conservación de la Naturaleza (ICCN).
Se denomina como grupos Mai-Mai a decenas de milicias armadas que operan en la zona este del país desde hace décadas, formadas por campesinos y otros civiles armados para defenderse de otros rebeldes e incluso del mismo Ejército congoleño.
Los guardabosques fallecidos eran Meddy Kengu Mahomet, de 29 años, y Hakizimana Ndamira Benoit, de 31, según el ICCN, que también informó de que el trabajador herido está recibiendo atención médica en un hospital.
"El ICCN condena enérgicamente este crimen odioso que ha quitado la vida a dos jóvenes congoleños llenos de futuro que habían consagrado sus vidas a la protección de las áreas protegidas y del medio ambiente", subrayó la institución.
El parte nacional de Virunga, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es uno de los espacios naturales con más biodiversidad de todo el planeta y alberga una cuarta parte de la población mundial de los gorilas de montaña.
Sin embargo, esta biodiversidad está amenazada por la pérdida del hábitat y la proliferación de cazadores furtivos y grupos armados tanto en los alrededores del parque como en su interior.
Cerca de 200 guardabosques han perdido sus vidas en poco más de una década con el objetivo de proteger este espacio natural, según la ICCN.
Desde 1998, el este de la RDC está sumido en un conflicto alimentado por las milicias rebeldes y el Ejército, pese a la presencia de la misión de las Naciones Unidas en el país (Monusco), con más de 16.000 uniformados sobre el terreno.
La ausencia de alternativas y métodos de subsistencia estables ha empujado a miles de congoleños a tomar las armas y, según el Barómetro de la Seguridad de Kivu (KST, por sus siglas en inglés), el este del país es el campo de batalla de más de 120 grupos rebeldes.