La pruebas nacionales
Evaluaciones escolares en la mira: ¿son realmente el problema?
Nuevamente se coloca sobre el tapete la eliminación de las pruebas nacionales, porque algunas personas consideran que ese mecanismo de evaluación no está acorde a los tiempos y no ha cumplido con sus objetivos.
¿Será cierto que el problema son las pruebas o se les echa la culpa por el fracaso del sistema?
Tengamos cuidado en la búsqueda incorrecta de justificantes para tapar otros problemas mayores, como la calidad de la docencia.
Un mal resultado en una evaluación tiene cinco componentes fundamentales: maestros deficientes, estudiantes con problemas de aprendizaje, un currículo incorrecto, ausencia de infraestructura educativa o unas pruebas mal diseñadas en su origen.
Cada uno de esos aspectos tiene solución, pero requiere de trabajo profundo, comenzando por los docentes, quienes imparten la enseñanza y tienen el control de las aulas.
Ojalá que esta nueva ofensiva para eliminar las pruebas nacionales sea motivada por una preocupación genuina y no por una estrategia para que no se expongan las deficiencias del sistema.