Las buenas intenciones no le dan a Dío

Dío Astacio cumplirá en abril un año como alcalde de Santo Domingo Este. Llegó al puesto con la buena intención de mantener un servicio adecuado de recolección de basura, pero a veces sus buenas intenciones carecen de lógica.

¿Cómo se le ocurrió estacionar en pleno asfalto unos contenedores de basura, del tamaño de un camión mediano, que ocupan casi todo el ancho de un carril? Si una vía tiene dos carriles, el contenedor ocupa uno y obliga a los conductores a esquivarlo, en un caótico Santo Domingo donde lo que más hace falta son espacios libres para circular.

Meses antes, la controversia se desató por el inicio de un proyecto para instalar 100 furgones en lugares donde hay vertederos improvisados. A los munícipes les tomó un tiempo comprender que estos furgones están destinados para depositar basura. Ahora, son esos furgones los que se sustituyen por contenedores pues no resultaron funcionales.

Se espera que en esta semana se lleve a cabo una reunión entre el Ayuntamiento y el Intrant para discutir sobre los contenedores. La meta es colocar 200.

Astacio tiene buenas intenciones para su municipio Costa del Faro, pero sus propuestas innovadoras necesitan un poco más de sentido común.

Diario Libre

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