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El Joaquín Balaguer que ¿no conocimos?

Memorias sin filtros, Balaguer habla desde la ficción

Miguel Ángel Asturias decía que "el trabajo del novelista es hacer visible lo invisible con palabras". Y el autor de "Washington Square", Henry James, afirmaba que la novela es el género más elástico de todo el arte literario: "Puede dilatarse hasta cualquier punto, puede abarcar absolutamente cualquier cosa. Lo único que necesita es un asunto y un pintor".

La novela, empero, es un bebedizo con bascosidad que exige visibilizar lo invisible y lo indivisible no solo con la palabra narrativa sino también con la pauta que la arquitectura del procedimiento señala y con la pericia que el narrador está obligado a exhibir para mostrar contrastes, dilucidaciones, vislumbres y hasta vulneraciones exquisitas que permitan al lector constatar que lee, justamente, una novela. Esa elasticidad que señalaba James, es real. Pero, el "asunto" requiere que el "pintor" no solo mueva su paleta para empinar su narración, sino que la utilice para que esa dilatación cobre réditos a la imaginación y no se cierre, a banda, como si terminara abroquelado frente a la trampa que su propio ingenio crea. La novela es, de hecho, una celada que el método narrativo coloca frente al relator para que acomode sus ritos y logre flexibilizar el objeto narrativo que crea. La elasticidad de la novela es, pues, una realidad objetiva y, a la vez, una treta. Puedes hacer lo que quieras con la trama, pero observando con cautela que no se desborde, o se achique, la integridad narrativa que el género demanda.

Pablo Gómez Borbón sorprendió al ambiente literario nacional, hace poco más de tres años, con una novela que se leyó con avidez, casi con furia, por el manejo diestro que mostraba un narrador hasta entonces desconocido sobre un "asunto" delicadísimo del que ya otros habían dado cuenta, pero desde la crónica o desde el reportaje periodístico. Gómez Borbón convirtió en novela, con nuevos y portentosos ingredientes, un hecho que, en su narrativa, modificaba la historia para relatarla con el dominio obvio que le facilitaban sus investigaciones. Muchas grandes novelas, hemos de recordarlo por si fuese necesario, no se han creado desde la imaginación -de hecho, casi ninguna-, siempre han estado activos los elementos de la observación, la experiencia personal, el destello racional, la realidad bifurcada y, en especial, la investigación. Recordábamos en días recientes como Mario Vargas Llosa trabajaba sus novelas, con la observación diligente y la investigación minuciosa y perspicaz, independientemente de las que nacieron desde la experiencia propia. "Morir en Bruselas" es una de las novelas más virtuosas de nuestra narrativa. Basada en hechos reales, el autor mostraba con garras la elasticidad que la novela dispensa, donde la ficción es solo una estrategia para contar lo que se ha investigado, lo que se ha leído y de lo que se tiene conocimiento, por cualquier vía.

Joaquín Balaguer es el nuevo objeto narrativo de Gómez Borbón. Una apuesta demandante que se come vivo a cualquier narrador. Las memorias del gobernante que pasa revista, con puntilloso engarce, a todos los pormenores de su vida, desde su génesis hasta sus momentos finales de vida. El libro se lee con afán, con pasión, con febril interés. La obra es monumental, y en el empeño del autor por descargar toda la memoria que su investigación ha obtenido el lector queda impedido de absorber ese grueso maderamen en unas pocas horas de lectura. Lo confieso: necesité tres meses para digerirlo todo. Como alterno mis lecturas, sabía cuál libro pendiente me sacaba de aquel estrépito cuando ya no podía seguir y debía buscar el respiro necesario. La de Balaguer -la de Gómez Borbón- es una memoria cruda, sin filtros, de la vida de un hombre que lideró una nación durante veintidós años, con un intervalo de ocho, sin contar sus treinta años de servicio a la dictadura y el tiempo siguiente después de la Era, porque el mando era suyo cuando maduraron los mangos a partir del 30 de mayo.

Gómez Borbón ha realizado una investigación amplia en libros, textos sueltos, noticias de primera mano, consultas selectivas, conocimientos particulares, para poder crear ese armazón vigoroso, pendenciero y verosímil -aunque poco importe esto último para la labor ficcional- que permite conocer la historia del ex jefe de estado. A su vez, como si tratase de perseguir el estilo oratorio y de escriba de Balaguer, asocia los episodios de su vida al relato de personajes y acontecimientos de la historia universal, en un acoplamiento y alternancia que, a pesar de preciso y erudito, no deja de interferir, sobre todo en los excesos, en la continuidad de la narración central.

"Yo, Joaquín Balaguer, dicto estas memorias desde el borde del sepulcro". Así se inicia la historia. Los orígenes, la familia, las relaciones de parentesco de la progenitora con Ulises Heureaux, el Santiago de Balaguer, los amores, Lucía, las infidencias de Manuel Cabral -sin el "del" para la época -en "Historia de mi voz" (aunque no lo anote el narrador), el ícono político y oratorio de Estrella Ureña, la conspiración contra Horacio, Trujillo, toda su vida en la dictadura, remarcando más sus años de gobernante en "democracia", el rol de la izquierda, las revelaciones. Si hay momentos que, a veces, provocan la risa, pero casi siempre la ira y el asombro, es cuando Balaguer oferta revelaciones de espanto. La ciudad romántica, su mínimo rol como abogado, el elogio a Demetrio Rodríguez y Elías Brache, los encuentros fortuitos, los obsequiosos del régimen trujillista,  sus enemigos, en especial Rafael Filiberto Bonnelly, los vocablos que el autor gusta repetir, los pases insistentes como rémora ("lo diré más adelante", "algo que explicaré después", de este estilo), el Doctor que afirma nunca haberlo sido, París, España, Colombia, Honduras, Sevilla, el cotilleo, al que Balaguer era propenso, los hijos no reconocidos, la Secretaría de Educación, el Foro Público. En fin, una historia larga, desmesurada, como lo fue todo en Balaguer, hasta los que él llama sus actos de concupiscencia caseras.

Resaltan en esta narración aspectos íntimos de la vida de Balaguer, la explicación justificativa de las acciones contra líderes y grupos de izquierda durante sus doce años, así como la atribución, y en otros casos, el señalamiento hacia otros, de acciones deleznables, por llamarlo de alguna manera, y de hechos que ensangrentaron la realidad de aquellos tiempos duros del gobernante, combatido con fiereza por la radicalización y los engranajes políticos de una época tan llena de sombras, en medio de algunas luces potentes. ¿Cómo ocurrieron las muertes de Otto Morales y Orlando Martínez?, para colocar dos ejemplos entre varios. Estas memorias de Balaguer relatan con detalles esos crímenes, responsabilizando a los ejecutantes que anota. La rivalidad entre Neit Nivar Seijas y Enrique Pérez y Pérez, Elías Wessin, su conjura y errores, La Banda, los sucesos del 12 de enero, Caamaño, la estrategia de guerra de Balaguer contra la guerrilla, Goyito, las leyes agrarias, Vincho Castillo, Polanquito, Gómez Bergés, Álvarez Bogaert, Majluta, Peña Gómez, Jorge Blanco, Peynado, Leonel Fernández, Hipólito, la ceguera, el accidente del helicóptero, las veces que enfrentó a la muerte, el Balaguer vengativo. Todo Balaguer hasta su muerte. Hasta la saciedad.

No es necesario que se diga que esta obra es o no una novela, por más elasticidad que esta permita, para asegurar que es un libro extraordinario, que el narrador ha deseado abarcar toda una gran historia, sin pausar y sin eliminar obstáculos. Libro que hace un relacionamiento comparativo con hechos históricos globales, lo cual permite considerarlo como un aporte a la Historia misma. Libro descarnado, casi brutal, desquiciante. El lector no se quedará impávido al dar cuenta de esta obra. Aseguro que sentirá ansiedad, se expandirá el desasosiego, se arrimará a la barbarie. Hay aspectos conocidos o leídos, y otros que muestran al Balaguer que no conocimos. O, tal vez, sí. Gómez Borbón sorprende de nuevo. Su obra es una lección de Historia que la investigación asumida delata. Es la memoria de Balaguer basada en la investigación, en el análisis y hasta en las conclusiones que expresa. Memoria narrativa. La ficción acompañando el relato memorioso, como el lazarillo a un ciego. Una memoria que Balaguer dictó desde el más acá de su vida inclinada, pero también ínclita, llena de incógnitas que aquí, al fin, se revelan; incombustible, incontinente, dilatada y casi ya, a estas alturas, difícil de encasillar. Recomiendo leerla poco a poco, tres o cuatro capítulos por día, o noche, respirar y volver uno o dos días después. Como mejor le convenga. El conocimiento de la historia reclama esta lectura. Despreocúpese del género. Un imperdible.

LIBROS
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    Pablo Gómez Borbón, Editora Búho, febrero 2025, 724 págs. Un libro indispensable para conocer el Balaguer que conocimos y el que creíamos conocer. Las revelaciones forman casi un libro aparte.
    YO, BALAGUER

    Pablo Gómez Borbón, Editora Búho, febrero 2025, 724 págs. Un libro indispensable para conocer el Balaguer que conocimos y el que creíamos conocer. Las revelaciones forman casi un libro aparte.

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    Augusto Roa Bastos, RAE, 2017, 785 págs. Edición conmemorativa de la Real Academia Española de la obra cumbre del gran escritor paraguayo sobre el gobierno de 26 años del dictador Gaspar Rodríguez de Francia.
    YO, EL SUPREMO

    Augusto Roa Bastos, RAE, 2017, 785 págs. Edición conmemorativa de la Real Academia Española de la obra cumbre del gran escritor paraguayo sobre el gobierno de 26 años del dictador Gaspar Rodríguez de Francia.

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    Ligia Urroz, Planeta, 2021, 232 págs. La memoria, de nuevo, y la reconstrucción de una época con los ojos de una niña que no sabía que su tío era el hombre que había robado los sueños de su patria.
    SOMOZA

    Ligia Urroz, Planeta, 2021, 232 págs. La memoria, de nuevo, y la reconstrucción de una época con los ojos de una niña que no sabía que su tío era el hombre que había robado los sueños de su patria.

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    Marco Ferrari, Debate, 2022, 217 págs. Una crónica que engancha al lector. La historia de la dictadura de 40 años de Salazar, en un Portugal que regresó a ser europea gracias a la Revolución de los Claveles.
    LA INCREÍBLE HISTORIA DE ANTÓNIO SALAZAR, EL DICTADOR QUE MURIÓ DOS VECES

    Marco Ferrari, Debate, 2022, 217 págs. Una crónica que engancha al lector. La historia de la dictadura de 40 años de Salazar, en un Portugal que regresó a ser europea gracias a la Revolución de los Claveles.

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    Marguerite Yourcenar, Sudamericana, 1984, 273 págs. Publicada originalmente en francés en 1951, hace 73 años. Traducida a 25 lenguas y considerada como la obra más profunda y hermosa del siglo XX, sobre el emperador que se convirtió en un espíritu libre.
    MEMORIAS DE ADRIANO

    Marguerite Yourcenar, Sudamericana, 1984, 273 págs. Publicada originalmente en francés en 1951, hace 73 años. Traducida a 25 lenguas y considerada como la obra más profunda y hermosa del siglo XX, sobre el emperador que se convirtió en un espíritu libre.

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Escritor y gestor cultural. Escribe poesía, crónica literaria y ensayo. Le apasiona la lectura, la política, la música, el deporte y el estudio de la historia dominicana y universal.