El último "caudillo"

En "Leonel Fernández: el último caudillo del siglo XX" (Hoy 5/06/24, p.19), la reputada politóloga y profesora universitaria Rosario Espinal confunde, para mi sorpresa, al último presidente de la República del pasado siglo con un caudillo. Cuando en República Dominicana los caudillos eran grandes terratenientes regionales cuyas "revoluciones" desestabilizaban la política nacional en los albores del siglo XX. "Revoluciones" que terminaron en 1916 con la ocupación militar norteamericana. Horacio Vásquez, caudillo regional antes de la Pax americana de 1916, fue elegido presidente de la República en 1924. Un gobierno que debía convocar a elecciones en 1928, pero la hybris que tanto atormentaba a los griegos de la Antigüedad, le nubló el espíritu al presidente Vásquez e hizo lo que estaba a su alcance para prolongar su gobierno sin considerar la crisis política que vendría y que permitiría al brigadier Rafael Trujillo, entonces jefe del ejército, acceder a la Presidencia de la República al postularse y, poco después del putsch del 23 de febrero de 1930, ser elegido presidente en mayo de ese año. Una "victoria" que le permitió permanecer en el poder hasta su muerte en mayo de 1961. En los primeros años de su dictadura, Trujillo terminó con el caudillismo en República Dominicana al decapitar a Desiderio Arias en 1932. Tras la muerte de Arias la dictadura había cerrado la era de las "revoluciones", que cuenta Bosch en La Mañosa.

La mejor ilustración de que Trujillo había terminado con el caudillismo es pues esa novela de Bosch; de lo contrario, la dictadura no hubiera permitido su publicación ni Mario Fermín Cabral, propietario de la imprenta El Diario y connotado trujillista, la hubiera dado a la estampa. Me parece que la politóloga Rosario Espinal confundió "caudillo", "líder" y "presidente".

Leonel Fernández fue el candidato del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), una organización concebida, pensada y fundada por Juan Bosch que trataba de crear un partido de cuadros y de líderes que pudieran dirigir democráticamente la República Dominicana. Rosario Espinal no explica, como es de rigor, por qué Fernández es un "caudillo", pero considera que Balaguer, Bosch y Peña Gómez a pesar de que "diferían en sus posicionamientos políticos, tuvieron en común un carisma que atraía fieles seguidores y grandes detractores, y ejercieron el liderazgo en sus partidos hasta el final de sus vidas. Esas características en común los convirtieron en los tres grandes caudillos del siglo XX post-Trujillo." ¿en qué consiste entonces el caudillismo de estos líderes? Eran simplemente grandes dirigentes celosos de su carisma y a veces autoritarios mas no caudillos.

La victoria de Leonel Fernández en 1996, además del apoyo de Bosch y Balaguer, así como de otros factores que no vienen a cuento, se debió a que representaba una nueva generación política. Vale recordar que Fernández, al ser elegido, era un joven de 43 años y fue quien abrió las puertas a la nueva generación que hoy gobierna República Dominicana. Por más que busco no veo cómo Fernández podría ser un caudillo cuando fue escogido democráticamente como candidato presidencial del PLD.

No hay escritura inocente. Considerar Leonel Fernández "último caudillo del siglo XX" ¿no sería descalificarlo en tanto candidato en los comicios de 2028, por la absurda razón de que fue el último presidente del siglo XX y que, del nuevo milenio, lo ha sido en dos ocasiones?

Guillermo Piña-Contreras

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Diplomático. Escritor; ensayista. Academia Dominicana de la Lengua, de número. Premio Feria del Libro 2019.