El Eurogrupo pide evitar el uso "generalizado" de políticas industriales públicas
MInistros de Economía y Finanzas dela eurozona apuestan por un enfoque "orientado al mercado" que pasa por impulsar las inversiones privadas y mejorar el entorno de negocios
Los ministros de Economía y Finanzas de la eurozona (Eurogrupo) pidieron este lunes evitar el uso "generalizado" de políticas industriales públicas como parte de los esfuerzos del bloque para mejorar su competitividad económica y reducir la distancia con otras potencias como Estados Unidos o China.
En su lugar, apuestan por un enfoque "orientado al mercado" que pasa por impulsar las inversiones privadas y mejorar el entorno de negocios, entre otras cuestiones que constan en una declaración pactada por los veinte socios del euro.
"Debe evitarse el uso generalizado de políticas industriales, en particular a nivel nacional, porque corren el riesgo de tener un impacto negativo sobre el mercado único", afirma el texto, en el que limitan este tipo de políticas públicas a "casos específicos" para resolver "fallos de mercado".
Cualquier estrategia industrial, añaden, debe ser diseñada "cuidadosamente" y tener un alcance "limitado" para "crear un entorno favorable al comercio", de forma que evite la mala utilización de recursos, las distorsiones comerciales o la "captación de rentas".
Los socios de la moneda común reconocen que la brecha de productividad del bloque con Estados Unidos o China se ha "ensanchado" en los últimos años y ven "urgente" aumentar las inversiones en investigación y desarrollo (I+D), aunque sin perder un "enfoque de mercado".
Capital humano europeo
El Eurogrupo considera "esencial" mejorar el capital humano europeo, al tiempo que apuesta por avanzar en la descarbonización y electrificación y por un sistema comercial global abierto basado en reglas pero con un enfoque "estratégico" que no cierre los ojos a las prácticas desleales de otros socios.
En el texto se impone, por tanto, la tesis de los socios europeos menos partidarios de una intervención fuerte del sector público para dirigir la economía que representan históricamente países como Alemania, Países Bajos, Austria o los nórdicos.
"La competitividad y la productividad pueden restaurarse creando las condiciones correctas para que empresas e industrias puedan crecer", defendió, por ejemplo, la ministra finlandesa, Rikka Purra, quien puso el acento en profundizar el mercado único y los mercados de capitales y simplificar la legislación.
En la misma línea, el Eurogrupo subraya que las inversiones "deberían proceder en primer lugar de fuentes privadas", en particular "en un momento en el que las finanzas públicas se han visto afectadas por múltiples crisis" y, en consecuencia, es necesaria "una consolidación fiscal gradual y sostenida".
Aunque los ministros reconocen que el papel de la financiación pública, remarcan que estos recursos "son escasos" y deben utilizarse como "catalizador" para impulsar la inversión privada y centrarse en prioridades conjuntas.
"No soy un gran fan de más deuda pública (...) No creo que sea el camino a seguir", resumió el ministro de Finanzas neerlandés, Eelco Heinen, quien emplazó a debatir más adelante este asunto.
Estados Unidos
El debate de la UE sobre su competitividad no sólo es una primera etapa antes de la cumbre de líderes prevista a finales de esta semana en Budapest, sino que coincide además con unas elecciones en Estados Unidos que podrían llevar de nuevo a Donald Trump a la Casa Blanca.
"Estamos en vísperas de un cambio en el mundo y Estados Unidos. Sabemos que Europa tendrá que contar primero consigo misma, así que es momento de actuar", dijo a su llegada al encuentro el ministro de Finanzas francés, Antoine Armand.
Este consideró que el reto "primero y crucial" para Europa es su propio crecimiento ya que si el continente se hace "más fuerte" podrá hablar mejor con sus socios, incluido Estados Unidos "sea cual sea el resultado de las elecciones".
"Es importante que reforcemos la resiliencia de la economía europea, también nuestras capacidades en defensa, porque en general vemos una situación geopolítica más fragmentada y conflictiva", dijo también el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, preguntado sobre si la UE está preparada para un nuevo mandato de Trump.
En este sentido, el comisario del ramo, Paolo Gentiloni, reiteró que "la colaboración entre la UE y EE.UU. no está en discusión sea cual sea el resultado", pero destacó que bajo la administración de Joe Biden se ha creado un "marco de relaciones multilaterales muy positivo" que esperó no se ponga en entredicho.
"Somos grandes aliados y lo seremos en el futuro. Estoy seguro de que sea cual sea el gobierno vamos a trabajar juntos y afrontar los problemas que pueda haber", dijo por su parte el holandés Heinen.