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Pedro Buerbaum
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Pedro Buerbaum: Lo que he descubierto es un país donde me gustaría criar a mis hijos en el futuro

Su creatividad para producir contenido en plataformas digitales en su natal España lo catapultó desde muy joven al reconocimiento público

Pedro Buerbaum: Lo que he descubierto es un país donde me gustaría criar a mis  hijos en el futuro
Pedro Buerbaum, el joven influencer español que decidió vivir en RD y no se arrepiente. (FUENTE EXTERNA)

El influencer, empresario y presentador del videopodcast Worldcast, con 1.5 millones de seguidores, tomó la decisión de vivir en la República Dominicana y, seis meses después, acumula muchas satisfacciones por haberse atrevido a hacerlo. 

Alaba la hospitalidad de los dominicanos y resalta el clima de libertad y estabilidad política y social que se respira.

Reitera, cuando se le pregunta, que la presión fiscal española fue uno de los factores clave de su mudanza, y destaca la ventaja de vivir en un país que lo acerca con facilidad a México, Miami y otros destinos que visita con frecuencia por su trabajo.

El carisma de los dominicanos también lo ha conquistado de tal manera que se alista para hacer grabaciones locales para su podcast. "Quería conseguir un equipo aquí y ya lo he conseguido. Quiero empezar a hacer grabaciones aquí cuanto antes", dice con evidente entusiasmo.

Compartimos un extracto de la entrevista que concedió a Diario Libre, tras la publicación "Españoles con altos ingresos deciden residir en República Dominicana".

—¿El país ha cumplido tus expectativas?

Yo llegué aquí a República Dominicana a principios de enero. Me parece que es un lugar lleno de oportunidades, me gusta mucho la mentalidad de aquí también, o sea, veo que las personas tienen ganas de progresar, tienen ganas de aprender. Encuentro mucha gente por la calle que sigue mi contenido, sigue mi podcast y me hace preguntas, pide consejos. En España el ambiente no es tan así, por esperpéntico que parezca. Se percibe que casi como que tienes que pedir perdón si las cosas te van bien. Como que uno no se alegra del prójimo cuando consigue sus objetivos o consigue prosperar, sino que más bien tratan de ponerte la zancadilla. 

Se dice: "algo habrá hecho mal, algo habrá hecho raro". No se reconocen del todo los méritos y aquí veo una actitud muy diferente frente a eso. Y luego lo que es el contexto, veo el país lleno de oportunidades.

Yo ahora mismo, como te comentaba, estoy recién llegando, llevo unos meses nada más. Estamos en junio, pues casi voy a cumplir seis meses aquí en República Dominicana y sí, veo que es un paraíso. El potencial turístico no hay ninguna duda de que está ahí, pero veo también a la República Dominicana como un lugar para desarrollar otras industrias y otro tipo de potencial también. Veo mucho espacio para crecimiento en diferentes ámbitos, y no solo tener que depender del turismo.

—Vives en una zona con acceso cercano a un aeropuerto internacional. ¿Eso contribuye a esa comodidad que sientes de poder viajar e interactuar internacionalmente sin hacer grandes trayectos?

Totalmente, eso es una súper ventaja. Yo al final viajo bastante. Uno de los motivos por los que elijo República Dominicana es por su posición estratégica, para poder moverme hacia Miami, hacia México, hacia Colombia con facilidad y también viajar a España. La posición del aeropuerto es súper privilegiada, súper cómoda, y la verdad que en ese aspecto muy contento.

—La República Dominicana ha mantenido una sólida tradición de libertad de expresión durante décadas. ¿Crees que deberían establecerse ciertos límites en los contenidos digitales para prevenir el discurso de odio o la difamación?

Sí. A ver, a mí hay una frase que me gusta mucho que es: "Mi libertad termina donde empieza la del otro". Entonces yo soy una persona que por lo general está muy en pro, muy a favor de la libertad en todos los sentidos. No solo la libertad de expresión.

Pero claro, en el momento que ya empiezas a entrar en el terreno de la otra persona, o empiezas a ofender, o empiezas con discursos de odio, creo que hay un consenso social que todos compartimos. Hay ciertas cosas que no se deberían permitir en las redes sociales o en los medios de comunicación. Creo que todos estamos de acuerdo en que no se puede promover terrorismo en Instagram, Twitter, en un grupo...

Lo que me ha molestado —que he podido ver en España— es que las redes sociales se utilicen como un instrumento de política, y que el efecto de cancelación se produzca cuando dices algo con lo que un partido político no está de acuerdo. No poder expresar la opinión abiertamente me parece que no se puede permitir, básicamente.

"Desde que llegué, he conocido muchas personas muy interesantes, historias buenísimas y gente con mucho carisma. El dominicano tiene un carisma innato."

—El auge de las plataformas digitales ha abierto nuevas oportunidades de negocio. ¿Tú crees que eres un modelo a seguir para muchos jóvenes que ya te están siguiendo los pasos?

Lógicamente, la gente al final busca referentes que imitar o referencias que tener y emular. Lo hacemos todos. Yo también, a la hora de emprender, he leído libros de personas a las que admiro, cuya trayectoria me gustaría conseguir.

Sí, creo que de alguna forma me he convertido —y lo veo en mis mensajes— en una referencia. Yo abro Instagram y tengo un montón de personas, especialmente hombres muy jóvenes, que están usando mi contenido como referencia, tratando de avanzar.

Creo que también se enfrentan a un momento particular de la historia donde hay muchos problemas. En España, por ejemplo, el acceso a la vivienda está muy complicado, los sueldos no se ajustan a la inflación, y cada vez es más complicado para ellos tener acceso a una casa o irse de vacaciones. Son personas que están buscando alternativas.

Yo he encontrado un nicho muy rentable y escalable desde cualquier parte del mundo, y al hablar de ello, mucha gente se ha interesado. Luego está la parte del podcast, que también es muy grande en España. Tenemos un millón y medio de seguidores.

Nunca fue mi intención convertirme en un líder de opinión a través del podcast, pero quieras o no, la gente que te escucha acaba dándole forma a sus opiniones. Trato de utilizar esa influencia con cautela, con un mensaje lo más razonable posible, al que se llegue a través del sentido común.

—¿Te sientes disruptivo, te sientes un poco antisistema o crees que lo que haces es innovar plenamente?

Yo simplemente siento que no tengo miedo a decir lo que pienso. En España, un discurso muy polémico de mi parte ha sido quejarme de la presión fiscal. Antes de venir a República Dominicana, me cobraban el 50 % de impuestos de lo que generaba. 

Con un 50 % de presión impositiva, esperas recibir mucho de vuelta de tu país. Y al final, lo que tenemos son escándalos en los medios de comunicación, que hoy mismo están en boca de todos en España y lo que descubrimos es que nos están robando el dinero de los contribuyentes. No acaba en hospitales ni en carreteras, como nos dicen.

Yo estaría dispuesto a pagar un 25 % de impuestos en España si se utilizara bien. Pero se pierde el dinero por todas partes. El dinero público no le duele a nadie; es como si fueran fichas de póker vacías. 

Quiere darle visibilidad a los dominicanos

  • —¿De alguna manera te ha servido de inspiración para algunos de tus contenidos desde que llegaste a la República Dominicana en tu podcast?

    Sí. De hecho, tengo muchas ganas. He estado coordinando con mi equipo de grabaciones para empezar a hacer podcasts y contenidos con personas de aquí. Desde que llegué, he conocido muchas personas muy interesantes, historias buenísimas y gente con mucho carisma.
    El dominicano tiene un carisma innato. Solo me faltaba coordinar el tema de grabaciones y conseguir un equipo aquí, que ya lo he conseguido. Quiero empezar a hacer grabaciones aquí cuanto antes.
    En cuanto a contenidos, sí, es un lugar que se presta: muy visual, bonito, con buen ambiente. Se presta a utilizar mi plataforma como un escaparate para mostrarle los dominicanos al mundo, sinceramente.

  • —¿Es decir que muchos dominicanos ya te seguían desde España? Fue una sorpresa...

    Desde que hacía contenido en España ya me seguían. Cuando llegué aquí, claro, no te lo imaginas. Estás acostumbrado a que te pidan fotos en tu país, pero te vas a la otra punta del mundo y la gente también te conoce, te siguen, te hablan de tus podcasts. Este podcast me gustó, este fue interesante. Quieras o no, te deja un poco en shock.

He dicho todo esto abiertamente. Pasa que muchas personas en España no se atreven a decirlo, porque tienen como ese miedo de que te persigan, pero están de acuerdo con mi discurso.

Ese reel donde decía que no podía ser la cantidad de impuestos que me cobraban tuvo cinco millones de visitas en mi perfil, porque lo compartieron en miles de cuentas. Si tuvo tanta repercusión, será porque mucha gente se siente identificada.

Entonces, más que disruptivo o antisistema, me considero alguien que se atreve a decir lo que piensa que no es justo, simplemente.

Como leíste, Rafa Nadal se va a instalar en República Dominicana. ¿Influye un poco también la estabilidad económica, política y social del país?

Yo creo que son muchos factores los que influyen. La estabilidad de la moneda frente al dólar, por ejemplo, históricamente. Influye la seguridad, a nivel social y político. No se sienten movimientos que hayan arrasado países como Venezuela. Aquí ni siquiera se le ven las orejas al lobo de que un movimiento así pueda tener éxito.

El pueblo dominicano es súper abierto, súper acogedor, súper amable. Los niveles de seguridad son muy buenos, por lo menos desde mi experiencia.

Cuando estuve en México una semana, me contaron historias de terror en todas las esquinas. Creo que eso contribuye mucho al lugar donde decides vivir. Es una decisión muy importante y poderosa para cualquier persona de nosotros, ya sean famosos o de alto poder adquisitivo o no.

Aquí en Dominicana lo que he encontrado un país donde me gustaría criar a mis hijos en el futuro. Me los imagino perfectamente por aquí, en un entorno en contacto con la naturaleza.

Soy isleño, de las Islas Canarias, y estoy acostumbrado a una vida al aire libre, donde hay buen clima, deporte y oportunidades. La República Dominicana tiene un cóctel de factores muy positivos. 

¿De alguna manera te ha servido de inspiración para algunos de tus contenidos desde que llegaste a la República Dominicana en tu podcast?

Sí. De hecho, tengo muchas ganas. He estado coordinando con mi equipo de grabaciones para empezar a hacer podcasts y contenidos con personas de aquí. Desde que llegué, he conocido muchas personas muy interesantes, historias buenísimas y gente con mucho carisma.

  • El dominicano tiene un carisma innato. Solo me faltaba coordinar el tema de grabaciones y conseguir un equipo aquí, que ya lo he conseguido. Quiero empezar a hacer grabaciones aquí cuanto antes.

En cuanto a contenidos, sí, es un lugar que se presta; muy visual, bonito, con buen ambiente. Se presta a utilizar mi plataforma como un escaparate para mostrarle los dominicanos al mundo, sinceramente. 

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Investigadora y autora de estudios sobre periodismo y comunicación en la República Dominicana. Ha sido reportera durante décadas en diarios nacionales. Es editora de Actualidad de Diario Libre.