Asunción anochece obediente a las restricciones de movimiento por coronavirus
Noelia F. Aceituno
Asunción, 17 mar (EFE).- Poco antes de las 20.00 hora local, cuando comienzan las restricciones de movimiento en Paraguay, Asunción, la capital del país, ya parecía una ciudad fantasma en su segunda noche de 'lo más parecido a un toque de queda', como calificó el ministro del Interior, Euclides Acevedo, esta medida para garantizar el cumplimiento de la cuarentena de 15 días para frenar el coronavirus.
Apenas circulaban personas por el microcentro asunceno, los pocos comercios que quedaban abiertos echaban el cierre y los vehículos enfilaban el camino de vuelta a casa, para evitar problemas con los policías que patrullan el país, a los que desde esta noche se suman también los militares.
En la calle solo permanecían los taxistas, personas en situación de calle, y algunos despistados que aprovechaban para comprar un lomito o una hamburguesa en los escasos establecimientos de comida rápida abiertos, sin aglomeraciones, porque ni siquiera su presencia da ahora para eso.
Asunción, al igual que el resto del país, ya estaba lista para su segunda noche de restricciones de movimiento de personas y, como en la primera, el aspecto fantasmal de la ciudad garantizaba un obediente cumplimiento del mandato de las autoridades.
Al dar las 20.00, uno de los vehículos de la Comisaría 3ª de Asunción comenzó su ronda por el centro de Asunción, sin sobresaltos ni altercados, como pudo comprobar Efe.
En menos de media hora, el móvil policial se cruzó con poco más de diez vehículos y el mismo número de personas caminando.
'Con actividad normal habría muchísima gente más', comentó a Efe el oficial primero Éder Morínigo, al pasar por la calle Silvio Pettirossi, una zona que, antes de las medidas del Gobierno, habría estado saturada de tráfico a esa misma hora.
ACCIONES PREVENTIVAS PARA FRENAR LA EXPANSIÓN
Morínigo y su compañero, el suboficial primero Pedro Benítez, también se mostraron sorprendidos por la desolada imagen de Asunción desde que el Ejecutivo de Mario Abdo Benítez decidió actuar ante el coronavirus.
Con solo dos casos confirmados en ese momento, el mandatario paraguayo respondió con rapidez para tratar de evitar mayores contagios y el 10 de marzo anunció 'medidas drásticas' para la población, con una cuarentena de 15 días y la suspensión de la actividad lectiva y de los eventos deportivos.
A medida que pasaban los días y los positivos aumentaban, esas acciones se fueron perfilando y endureciendo hasta llegar a limitar los movimientos de personas y vehículos desde las 20.00 hasta las 4.00 de la madrugada, durante el tiempo que se prolongue la cuarentena, como informó Acevedo este lunes en una conferencia de prensa.
Un día después, el ministro de Defensa, Bernardino Soto, agregó que los militares también se sumarían a esas patrullas de la Policía Nacional, y al caer la tarde ya estaban presentes en la zona de la Costanera, el paseo fluvial de Asunción.
La consigna de las patrullas es dispersar las aglomeraciones, como los clientes en las lomiterías o gente en parques, y la Policía puede 'actuar de oficio' en caso de oposición de la ciudadanía, para lo que cuentan también con 'mucho acompañamiento de la Fiscalía', como explicó a Efe el oficial primero de la Policía.
Pero en este recorrido por el centro de Asunción nada de eso fue necesario y la población parece haberse tomado en serio las medidas del Gobierno.
Además, en caso de incumplimiento, las multas van desde los 8 hasta los 40 millones de guaraníes (de los 1.200 dólares a los 6.000 dólares) y se contemplan penas de cárcel de entre 12 y 18 meses.
Durante la primera noche de limitaciones, la Policía estimó un acatamiento del 95 %, según los datos proporcionados el martes por el ministro del Interior.
Abdo Benítez también salió esta jornada a agradecer a los paraguayos su disciplina a la hora de cumplir con las restricciones y a pedirles que mantengan este comportamiento.
'Quiero agradecer a mis compatriotas, que en poco tiempo demostraron su madurez, su compromiso y su protagonismo en acompañarnos en esta difícil tarea que hoy nos toca enfrentar a todos los paraguayos y juntos lo vamos a hacer', expresó el presidente en un mensaje al pueblo.
A última hora de la tarde, el ministro del Interior, Julio Mazzoleni, confirmó en su cuenta de Twitter el undécimo caso de coronavirus en el país, después de que dos muestras analizadas dieran positivo. EFE