Los dolores de cabeza de Ángel Hernández durante su gestión en el Minerd
El ministro habló sobre las dificultades con la falta de cupo y las luchas con el gremio de los maestros

El ministro Ángel Hernández enumeró los obstáculos que enfrentó durante su gestión y los intereses que se vieron afectados, lo que, según dijo, le causó más de un dolor de cabeza.
Abordó uno de los temas más polémicos de su gestión. El proyecto Libro Abierto, mediante el cual se distribuyeron libros físicos y digitales a los estudiantes del sistema público. "Cuando tocas un interés económico, la resistencia es fuerte. Y el tema de los libros de texto generó una gran campaña en contra. Pero si hay algo de lo que hoy me siento más orgulloso, es de esa iniciativa", aseguró.
Pese a las críticas, informó que en este año escolar se distribuyeron 12 millones de materiales didácticos con una inversión de aproximadamente 700 millones de pesos, una cifra significativamente menor a los casi 5,000 millones que se gastaban anteriormente.
Y destacó que, gracias a este programa, los estudiantes de secundaria y educación para adultos recibieron libros actualizados tras más de dos décadas de rezago en los contenidos.
Sindicato de maestros
Hernández también cuestionó el papel de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) y la arbitrariedad con la que, según él, actúan sus distintas seccionales.
Y aclaró que no hay una única ADP, sino varias en cada provincia, lo que complica la implementación de políticas educativas a nivel nacional. Por ello criticó decisiones de ciertos dirigentes que, sin razones de peso, pueden paralizar toda una zona educativa, afectando a miles de estudiantes.
Como ejemplo, mencionó el caso de la intoxicación de 30 niños en una escuela rural de la provincia Duarte. A raíz de ese incidente, la ADP suspendió las clases en toda la región, dejando a más de 13,000 estudiantes sin docencia, algo que Hernández consideró desproporcionado.
Cupo escolar
Otro desafío señalado por el ministro fue la falta de cupos escolares en ciertas zonas de alto crecimiento demográfico y económico.
De acuerdo con Hernández, la migración interna ha provocado un desplazamiento masivo de la población hacia las periferias de las grandes ciudades, especialmente en Santo Domingo y en zonas turísticas como Bávaro y Punta Cana.
Siguió explicando que el crecimiento inmobiliario en lugares como San Isidro es exponencial, con cientos de apartamentos en construcción que estarán habitados para el próximo año escolar. Sin embargo, el sistema educativo no ha logrado construir escuelas al mismo ritmo que el desarrollo urbano, lo que genera un déficit de plazas para los estudiantes.
En contraste, en provincias como Elías Piña o San Juan de la Maguana, donde la población ha disminuido, hay suficientes cupos escolares, y confirmó que hay escuelas en el interior del país que tienen 10 estudiantes y 10 maestros
También indicó que para mitigar esta situación se creó el Programa de Atención a la Sobrepoblación Escolar (PASE), con el que se financia la educación de los estudiantes que se quedan sin plaza en colegios.
Esta iniciativa, que inició en 2022 con 2,200 niños, se triplicó en tres años, solventando actualmente los casos de más de 7,000 niños.