VIDEO | Vecinos del sector Evaristo Morales denuncian cinco años de abusos por construcción sin protección
Obra sin protección legal pone en riesgo a familias en la calle Paseo de Los Locutores
Desde hace cinco años, los vecinos del residencial Paseo II, en la urbanización Evaristo Morales, perdieron la paz debido a la construcción de un edificio de aproximadamente 10 niveles, que, alegadamente, no ha respetado las normas ni las leyes de construcción.
Desde que se inició la excavación para construir los sótanos hasta el último nivel, han sido años de tortura, peligro y daños a las propiedades, cuenta Néstor Rodríguez, uno de los vecinos afectados y que tiene 40 años viviendo en el lugar. La construcción carece de las mallas de protección que establecen las normas y leyes de construcción.
Cuenta que ante el miedo que significaba que algún objeto le cayera encima a los resientes o a los vehículos aceptaron que se instalara en su patio una plataforma de plywood que ha estado plagada de carcoma y algunas piezas podridas por el tiempo.
Rodríguez mostró un hoyo supuestamente dejado por un clavo que se cayó desde lo alto del edificio y afirma que, si hubiese habido una persona en el lugar, la consecuencia pudo ser fatal. Mostró hundimiento del aluzinc que protege los vehículos de los residentes.
Obras sin mallas ni pasarelas ponen en riesgo a transeúntes en el Gran Santo Domingo
"Nosotros sugerimos que lo más rápido posible, que se hagan cargo de los daños porque no queremos ir a la justicia, aunque sabemos que la justicia tarda mucho, pero es segura y no queremos conflicto con nadie, pero han roto cristales de vehículos, a parte de los problemas de ruidos que han afectado la salud de nosotros".
La jardinería se secó por la construcción, entre ellas palmeras y en el lugar se pueden observar trozos de concreto que caen con frecuencia de la construcción, así como pedazos de madera y hasta un tubo metálico. Demandan el pago de los daños materiales causados a vehículos y las áreas que no se pueden utilizar.
"Ellos se creen que, a base de relaciones, a base de privilegios que le han puesto incluyendo unos permisos de un lindero de un metro y medio de una construcción comercial donde nosotros lo que tenemos aquí es residencia, amparándose ellos en todos los privilegios que le han dado los políticos, comenzando con la Alcaldía y después con el Ministerio de la Vivienda, que nunca he visto a nadie de ellos aquí supervisando esa rastrería que tienen ahí de construcción", manifestó de forma airada.
¿A quién reclamar?
Expresó que han agotado todos los pasos como reclamar ante la Fiscalía del Distrito Nacional que lo remitió a otra instancia, tampoco en el Ministerio de la Vivienda han tenido respuestas. Diario Libre intentó una reacción de los constructores, pero no fue posible.
Silvia Fernández, es otra de las familias afectadas en el edificio de cuatro niveles donde vive y explica que no solo han tenido daños materiales en esos cinco años, sino también de salud y psicológico. Desde el principio el ruido de las retroexcavadoras y los camiones no los dejaban en paz.
"Hemos tenido condiciones de salud muy afectados porque ahí se eh incluso todavía hemos visto que se hacen unos pozos de agua muy grande en la construcción cuando estaba más abierta y en particular yo tuve una situación de que dos hijos míos les dio dengue producto de eso".
Informó que las casas siempre están sucias por el polvo que vuela desde el edificio de construcción porque no cuenta con la protección de ley que evite afectación a los vecinos. "Yo soy asmática y he tenido crisis de asma durante este período de tiempo, la limpieza es permanente y esto nos afecta a todos los vecinos", dijo.
Al igual que ese edifico, otros en la calle Roberto Pastoriza también se construyen sin ningún tipo de seguridad para transeúntes y vecinos.